La playa de Pinedo en València ha acogido este fin de semana una gran iniciativa en la que un centenar de voluntarios se han empleado a fondo para retirar la mayor cantidad posible de residuos que el mar, durante la borrasca Gloria, expulsó a la arena. Y el resultado ahí esta: 243 kilos de residuos recogidos de los que 169, más de la mitad, eran plásticos.
Se trata de una campaña organizada por la ONG Xaloc que bajo el nombre 'Marea Salada' ha repartido por grupos a los voluntarios para peinar zonas acotadas de la playa e ir retirando todo residuo que se encontraran a su paso.
Entre los residuos retirados ha llamado mucho la atención haber encontrado neumáticos de coche, gran cantidad de botellas de plástico, las temidas toallitas húmedas y bastoncitos de los oídos, sobre todo en el espigón. "Lo más impactante de todo es sacar tanto kilo de plástico de una playa que, a primera vista, parece que esté totalmente limpia", ha destacado el responsable de Comunicación de Xaloc, Alejandro Jiménez.