Valencia Basket se aseguró un lugar en la final de la Supercopa LF Endesa tras derrotar a Hozono Global Jairis (75-61) en una semifinal cargada de emoción. Valencia Basket se medirá ahora en la final a Casademont Zaragoza, en un duelo donde buscarán repetir el éxito del pasado año y alzarse nuevamente con el trofeo.
Las taronja superaron una primera parte complicada para darle la vuelta al marcador con una impresionante racha en el tercer cuarto que dejó sin opciones al equipo anfitrión.
A pesar de las bajas importantes en el puesto de base, como la de Cristina Ouviña, el equipo de Rubén Burgos encontró la manera de sobreponerse y avanzó a la final donde buscarán revalidar el título ante Casademont Zaragoza.
El partido comenzó con un ambiente electrizante en el abarrotado Pabellón Fausto Vicent. Con la presión de jugar en casa, Hozono Global Jairis salió al campo dispuesto a lograr una hazaña histórica ante un Valencia Basket que no terminaba de encontrarse en los primeros compases del juego.
El equipo dirigido por Bernat Canut mostró una imagen sólida, con Paula Ginzo marcando la diferencia desde la pintura, y llegó a tomar una ventaja de hasta 10 puntos. La férrea defensa local hizo que Valencia Basket tuviera dificultades para anotar, finalizando el primer cuarto con un marcador bajo de 9-12.
En el segundo cuarto, el guion parecía seguir favoreciendo a las locales, que seguían dominando en defensa y ampliaban la diferencia con un triple de Bertsch que ponía el partido 7 puntos arriba.
A pesar de los esfuerzos de Rubén Burgos para ajustar el juego, las taronja continuaban chocando contra el muro defensivo de Jairis, que aumentaba la ventaja a 10 puntos tras un parcial de 5-0.
Sin embargo, en los últimos minutos del segundo cuarto, Valencia Basket empezó a reaccionar.
Lideradas por Queralt Casas y apoyadas por los puntos clave de Zeta Iagupova, las taronja lograron reducir la diferencia antes del descanso, cerrando el marcador en 32-37 a favor de Jairis.
El punto de inflexión llegó tras el descanso. Valencia Basket regresó al campo con una nueva energía y una defensa renovada que dejó sin respuesta al equipo local. Leticia Romero y Nadia Fingall asumieron el protagonismo en ataque, y con un parcial demoledor de 8-0, el equipo de Rubén Burgos logró ponerse por delante en el marcador.
Desde ahí, la maquinaria ofensiva taronja no dejó de funcionar. Las valencianas comenzaron a acertar tanto desde la línea exterior como desde la pintura, mientras que Jairis, incapaz de romper la defensa rival, pasó 7 minutos sin anotar.
La ventaja de Valencia Basket se disparó a 17 puntos con un contundente 22-0, lo que prácticamente sentenció el partido antes del último cuarto.
Con el marcador 56-42 al inicio del último cuarto, el Valencia Basket mantuvo el control del juego, liderado por las imponentes actuaciones de Alba Torrens y Stephanie Mavunga, quienes fueron imparables en la zona.
La renta llegó a ser de 20 puntos en los últimos minutos, gracias a la contribución de Iagupova y Mavunga. Aunque Jairis intentó una última reacción con un parcial de 8-0, la ventaja taronja era ya insalvable.
Al final, Valencia Basket se llevó el partido con un marcador de 75-61, sellando su pase a la final por segundo año consecutivo.
Rubén Burgos, entrenador del Valencia Basket, destacó tras el encuentro la capacidad del equipo para superar las adversidades, señalando la importancia del trabajo en equipo y el carácter demostrado en el tercer cuarto. "Nos costó entrar en ritmo, pero una vez que logramos ajustar nuestra defensa, el equipo mostró su verdadero potencial", comentó Burgos.
El quinteto inicial del Valencia Basket estuvo compuesto por Leticia Romero, Queralt Casas, María Eraunzetamurgil, Nadia Fingall y Kristine Vitola, quienes debutaron oficialmente en la nueva temporada con una sólida actuación defensiva.
A pesar de los nervios iniciales, el equipo supo reaccionar en el momento justo para llevarse una victoria crucial que les coloca a un paso de revalidar el título de la Supercopa, empujados por mas de dos centenares de aficionadas y aficionados que no pararon de cantar y animar.
