El delegado de UPyD en la zona, Fran Raga, afirma que, “desde la semana pasada se viene realizando podas en la Avenida de Ramón y Cajal, y los restos, se dejan en las aceras amontonados, ocupando un espacio y suponiendo con peligro a los viandantes, sobre todo a los niños de la población y los vehículos que circulan por la Avenida, ya que una ráfaga de viento las podría desplazar hasta la calzada”.
Asimismo, UPyD considera que los restos de poda pueden suponer un recurso adicional a las arcas del ayuntamiento si se valorizan adecuadamente como biomasa, además del beneficio medioambiental que ello supone.
UPyD ha señalado que los árboles de esta avenida son muy frondosos y que tienden a oscurecer las aceras y entradas a los comercios en esta avenida, por lo que solicita al Ayuntamiento que la frecuencia de la poda de estos árboles sea más asidua de lo que hasta ahora viene realizando el consistorio.