Torrent reforestará con 11.000 pinos, encinas, madroños y palmitos la zona afectada por los incendios forestales y por la plaga del tomicus de la Serra Perenxisa.
En el desayuno con los medios de comunicación –en la que nos han regalado unas plantas similares a las que repoblarán la sierra Perenxisa, Amat y Ros afirmaron que los trabajos comenzarán cuando se limpie y se adecúen las zonas afectadas “y cuando haya llovido un par de veces para que el suelo esté preparado para los árboles”.
De momento se ha dividido el paraje natural en dos áreas: la afectada por el incendio y la afectada por la plaga Tomicus. En la primera área se pretende reducir la erosión del suelo para crear y recuperar la cubierta vegetal. La recuperación se realizará mediante la implantación de una masa arbórea, en las zonas donde no se conseguiría de forma natural por la falta de regeneración del Pinus halepensis Mill. Y en la segunda área se va a retirar los pies afectados para disminuir la plaga, mediante la introducción de una mayor cantidad de especies arbóreas que están en minoría frente al Pinus Halepensis Mill, para que haya mayor diversidad y fortalecer el ecosistema.
Los operarios ya han comenzado a trabajar en la zona, disminuyendo la plaga y retirando los pies afectados. Además se están apeando los árboles quemados y muertos ya que pueden aumentar la erosión. Se están realizando fajinas y albarradas en las zonas afectadas. Es sistema radica en coger los troncos quemados y cortarlos para ponerlos con estacas, muchas veces con los mismos tocones, de manera horizontal a la pendiente con el objetivo de retener el suelo para que, cuando llueva o haga fuertes rachas de viento, no se desprenda. Los troncos y las ramas al tresbolillo se están colocando con una separación de 4 m en el eje horizontal y 4 m en el eje vertical, apoyados en los tocones siguiendo las curvas de nivel pegadas al suelo.
Con el fin de mejorar el arraigo de las plantas introducidas, en el momento de la implantación se va a introducir una sustancia llamada hidrogel. Esta sustancia provoca que la humedad que existe en el suelo quede retenida para que poco a poco se vaya liberando otra vez al exterior, justo cuando la humedad de este suelo sea inferior a la que posee el hidrogel. Además, se instalará un tubo protector frente a la fauna que será cilíndrico de doble capa y mantenerse unos cinco años.