Comenzó siendo una alternativa lúdica y de ocio para aquellos que vivían en el cap i casal y no podían abandonar la capital para disfrutar de las vacaciones estivales. Más de un siglo después desde sus comienzos, la Feria de Julio de Valencia es toda una tradición veraniega que atrae a centenares de personas de todas las edades y procedencias en un mes de fiesta con actividades diferentes y variadas pensadas para todos los públicos.
En su edición de 2018 contará con música, teatro, cine, pirotecnia, cabalgatas, magia, espectáculos o las preselecciones falleras para las Fallas de 2019.
La Feria de Julio acerca la ciudad, como no podía ser de otra forma, a un turismo emergente, cada vez más numeroso, que elige nuestra ciudad como destino vacacional en los meses de verano.
El cierre de fiesta la podrá la colorida Batalla de Flores, el domingo 29 de julio, que teñirá el Paseo de la Alameda de flores y pétalos de claveles. Una lluvia de flores, hasta un total de 1,5 millones de claveles, que las falleras de las diferentes comisiones de Valencia arrojan desde las tradicionales carrozas para deleite de los hasta 600 asistentes que se esperan.
Crónica de Marta Pérez Ortiz (@marpeor3) para Hortanoticias