El Ayuntamiento de Quart de Poblet ha reabierto la calle San Vicente Ferrer tras llevar a cabo las obras de mejora de la accesibilidad y de parte de las infraestructuras, con lo que se ha renovado y revalorizado la vía, cumpliendo con los parámetros urbanísticos actuales. El proyecto, que ha contado con un presupuesto de 337.182, 66 euros y ha tenido una duración de cuatro meses, ha afectado tanto a la infraestructura viaria como a la red de saneamiento y de abastecimiento de aguas potables.
El programa “Quart sin barreras” ya recibió el Premio Reina Sofía de Accesibilidad Universal de municipios en 2005.
Por otro lado, y siguiendo el Plan de Movilidad municipal, se ha ampliado la calzada para permitir que los servicios de urgencia puedan acceder a la calle, así como a sus travesías, circulación que era imposible debido a la estrechez de la vía.
Gracias a la ampliación de la calzada y con el objetivo de convertir esta vía en un espacio más amable pensado para el peatón, se ha destinado un único lado de la calle para el aparcamiento, estableciéndose una banda de aparcamiento de 2, 10 metros. Además, y tras la consulta realizada a los vecinos, también se han colocado bolardos para impedir el mal estacionamiento en determinadas zonas.
En cuanto al pavimento, se han colocado adoquines de hormigón en las aceras y de hormigón impreso en la calzada. Para cuidar la estética del diseño, las tapas de las arquetas mantienen el mismo modelo que los adoquines.
De igual manera, y manteniendo la línea de trabajo que sigue Quart para convertirse en una smart city sostenible se han plantado árboles que recibirán riego por goteo, haciendo que el espacio urbano resulte más agradable. Por último, la red de alcantarillado y las instalaciones de agua potable se han renovado y se han colocado imbornales para la recogida de las aguas pluviales.