Ante la crisis sanitaria y el estado de alarma que se vive durante las últimas semanas, algunas familias más vulnerables a la situación están teniendo serios problemas para abastecerse de los bienes de primera necesidad.
Hasta el momento se han repartido cerca de 12 lotes entre familias especialmente sensibles a la situación, la mayoría de ellas, con menores de edad. Estas unidades de ayuda incluyen patatas, colacao, gel, lavavajillas, tomate frito, espaguetis, arroz, valencianas, manzanas, lechuga... También cuentan con pollo, conejo y chuletas de cerdo o pavo, atendiendo a la religión de los destinatarios.
Algunos comercios locales, por su parte, ha contribuido donando algunos alimentos, como en el caso del restaurante Nazaret, que ha ofrecido huevos, y de la guardería Sol y Luna, que ha aportado yogures.
El trabajo se continuará realizando durante los próximos días con la ayuda de Protección Civil Puçol, colectivo encargado del reparto, y con el respaldo de Bienestar Social, que lo considera "fundamental para que todos los vecinos puedan superar esta situación con en condiciones dignas", según Amparo Ferrer, responsable del departamento.