Hay una frase popular que dice así: los amigos se eligen, la familia no. Y ustedes se preguntaran qué tiene que ver esto con la realidad política de Torrent, y la verdad es que mucho.
En este decidir y elegir entre familia y amistad, en 2015 los denominados gobiernos del cambio decidieron unirse, no sé si por familiaridad o por amistad, para dar la alcaldía a quien no había ganado las elecciones.
Entre sus lazos de consanguinidad o de amistad lo que se aplicaba era apartar al Partido Popular, el ganador de las elecciones, de la alcaldía. Como prueba de su unión se firmo un pacto a tres: PSOE, Compromís y Guanyant.
Esta unión se firmó ante notario, que no ante el pueblo, pues ellos no habían ganado, y lo formalizaron con la entrega de la Vara de mando por parte de Compromis al socialista Jesús Ros. Que anteriormente en ese juego del escarceo del amor había dicho de él “que no pondría al lobo a cuidar de las ovejas”. Cosa que si que sucedió, mal que nos pese que a los ciudadanos de Torrent nos llamen ovejas, y que ellos sean ahora los guardianes de las promesas. Y así, tal vez por los pactos o por la efusión del amor en una noche de verano se juraron amor eterno.
Por eso y por muchas cosas más en Torrent la inactividad es una realidad. No interesa mejorar el municipio. No interesa bajar los impuestos. No interesa hacer política social o generar empleo. No interesa solucionar problemas. No interesa escuchar al ciudadano, y se esconden en los despachos. No interesa. Porque su interés no es el general, si no el particular. Ahora lo que interesa es estar a bien con quien te dio la alcaldía pues como en la familia o en la amistad cada uno elige con quien quiere estar y en Torrent eligieron no estar con el pueblo. El pacto fue un engaño.
Amparo Folgado | portavoz Grupo Popular Ajuntament de Torrent | @amparofolgado