La empresa estadounidense Lime alquilará 250 de sus patinetes eléctricos durante un período de prueba de tres meses en el recinto de la Marina de València, con el objetivo de probar si ese modelo puede ser aplicado posteriormente a toda la ciudad.
Mientras el Ayuntamiento y la empresa siguen negociando una salida a esa polémica, La Marina de València Living Lab permitirá testar, en un entorno acotado y controlado, productos y proyectos susceptibles de ser aplicados posteriormente en la ciudad.