Las obras para la construcción de un paso de peatones en la carretera CV-311 que une Tavernes Blanques y Alboraia han comenzado tras el acuerdo alcanzado por los tres términos municipales afectados: Tavernes Blanques, Alboraia y València.
El equipo de Gobierno de Tavernes Blanques recuerda que muchos vecinos y vecinas utilizan ese tramo para ir o venir de Alboraya a Tavernes "no existiendo ninguna alternativa para el peatón exceptuando la ruta por el Barranc del Carraixet. No hace falta más que esperar a que caiga la noche para observar el peligro que conlleva la ausencia de iluminación por una carretera bastante utilizada por los vehículos".
Tras décadas de reclamaciones por parte de Tavernes Blanques y Alboraia, la Diputación de València se reunió hace 4 años con los municipios para explicarle un plan embrionario sobre una mínima urbanización: acera en la parte de la gasolinera e iluminación.
Aunque desde Tavernes Blanques reconocen que "nos hubiera gustado una urbanización más ambiciosa, con un carril bici que uniera ambas poblaciones, pero entendemos que no podíamos demorar una solución urgente".
El ayuntamiento de Tavernes Blanques ha querido destacar la insistencia de los alcaldes, Mari Carmen Marco (Tavernes Blanques) y Miguel Chavarría (Alboraia) "para que se licitara la obra. Finalmente parece que la tenemos aquí. Seguiremos reclamando y proponiendo mejoras de conexión entre ambos pueblos vecinos".