La Guardia Civil, en el marco de la operación 'Emere', ha procedido a la detención de tres personas pertenecientes a un grupo que se hacían pasar por proxenetas para extorsionar a clientes que habían tratado de concertar sus servicios. Los detenidos, a los que les constan numerosos antecedentes por hechos similares operaban por todo el territorio nacional.
Aunque la cita no había llegado a producirse, el denunciante abonó la cantidad de 580 euros en concepto de las molestias ocasionadas, tal y como se le requirió. Al día siguiente, recibió otro mensaje en el que se le reclamaba los beneficios del jefe, para por fin poder eliminarlo de la lista y zanjar el asunto. En esta ocasión, la cantidad que le exigían era de 950 euros.
Según manifestó el ciudadano a los agentes sintió mucho miedo ya que le intentó explicar a su interlocutor que estaba trabajando y que más tarde hablarían pero éste no accedió a esperar, subiendo el tono de las amenazas para que pagara y no tener problemas serios.
Por tal motivo, la Guardia Civil continuó con las investigaciones para localizar al presunto autor. Fruto de ello, los agentes averiguaron que detrás de estas amenazas había un grupo organizado.
Distintas redes sociales para localizar a posibles víctimas
Este grupo empleaba distintas redes sociales para localizar a posibles víctimas, a las que ofrecían una cita de carácter sexual. Posteriormente, recopilaban la información necesaria que después empleaban para culminar con éxito la extorsión. Los encuentros nunca llegaban a producirse, sin embargo, empleando amenazas contra las víctimas y sus familiares, exigían el pago del servicio.
Cabe destacar el grupo llevaba delinquiendo desde enero del presente año por todo el territorio nacional, constando denuncias en La Coruña, Madrid, Valencia, Málaga, Tenerife y Gran Canaria.
La operación ha sido llevada a cabo por el Área de Investigación de la Guardia Civil de San Juan de Alicante y dirigida por el Juzgado de Instrucción de Alicante.