Vicente Lladró, el último de los fundadores de la empresa de cerámicas Lladró, ha fallecido este viernes, según han informado fuentes del entono del empresario.
El crecimiento de los encargos y el reconocimiento de sus trabajos dio origen a una gran empresa en menos de una década, que se instaló en la vecina localidad de Tavernes Blanques, y posteriormente inició una expansión internacional que le ha llevado a tener presencia en los cinco continentes.
En 2003 la familia Lladró decidió romper la sociedad, que hasta entonces se repartía entre los tres hermanos al 33%, de modo que Juan y sus cuatro hijas pasaron a controlar el 70%, y el 30% restante, a partes iguales entre los otros dos hermanos, José (y dos hijas) y Vicente (y sus tres hijos).