Este martes se ha encontrado el cuerpo sin vida del canónigo emérito de la Catedral de Valencia, Alfonso López Benito, en su casa de la céntrica calle Avellanas con signos de haber sido estrangulado y evidencias que señalan que podría llevar varios días fallecido. Además, alguien podría haber estado usando el móvil del sacerdote haciéndose pasar por él.
Agentes del grupo de Homicidios de la Brigada de la Policía Judicial de Valencia se han hecho cargo de la investigación para esclarecer la muerte del canónigo, que estaba vestido y acostado en su dormitorio.
Al lugar se han desplazado agentes de la brigada Provincial de Policía Científica y el equipo judicial para el levantamiento del cadáver, que ha sido sacado del edificio y subido al furgón fúnebre pasadas las 14:00 horas.
El conserje del edificio, que mantenía una estrecha relación cordial con el fallecido, ha sido quien al tener llaves de la vivienda ha facilitado el acceso para ha comunicado a los agentes que alguien estaba utilizando el móvil del sacerdote para hacerse pasar por él, ya que le había enviado un mensaje de Whatsapp diciendo que se ausentaría varios días para resolver unos asuntos personales, por lo que no le extrañó no saber nada de él.