Plásticos, papel, madera o basura que llegan de aguas exteriores del Puerto son algunos de los restos de materiales que se recogen en las aguas del interior del Puerto de València, pero también grandes troncos que suponen un riesgo para la navegación y que entran en las dársenas tras una tormenta. Durante el primer semestre del año, la Autoridad Portuaria de València (APV) ha retirado un total 480 kilos de residuos flotantes entre la zona de servicio del recinto portuario y el antiguo cauce del río Turia. Para su recogida, la APV dispone de varios instrumentos como la barrera anticontaminación situada en el río o la embarcación Limpiamar.
En comparación con el curso pasado, este año ha descendido el número de residuos extraídos ya que se han producido menos episodios de suciedad en el antiguo cauce del río Turia procedente de aguas arriba. Y es que a lo largo de 2020 se recogieron 3.350 kilos de residuos flotantes, muy por encima de los datos del primer semestre de 2021.
El Puerto de València también cuenta con la Limpiamar, una embarcación tipo “pelícano” de unos diez metros de eslora que se encarga de mantener limpias sus aguas interiores con una cesta en la proa con la que cada día va recogiendo los objetos que se encuentra en la superficie, como plásticos o maderas, y que llegan a las aguas interiores del puerto procedentes del exterior, arrastrados normalmente por tormentas. La embarcación está activa de lunes a viernes y está de guardia las 24 horas del día en contacto con el centro control emergencia para acudir en casos excepcionales, como grandes troncos que supongan un peligro para la navegación de los barcos. Además de su papel diario de vigilante de la calidad del agua, la Limpiamar también actúa para extraer los objetos flotantes del antiguo cauce del río Túria, que conecta con el Puerto, como complemento a la barrera anticontaminación instalada en esa zona.