El pueblo de Castellar-L’Oliveral y los barrios de Benimaclet, El Pla del Remei y Malilla contarán con cuatro nuevos mercados extraordinarios de alimentos ecológicos y de proximidad una vez a la semana, con un máximo de entre 15 y 20 paradas cada uno. El Pleno ha aprobado esta mañana su creación con los votos a favor del equipo de gobierno, el rechazo de populares y Vox, y la abstención de Ciudadanos.
Los cuatro nuevos mercados de venta directa agroalimentaria se localizarán en la calle Figuereta, en Castellar-L’Oliveral; la plaza de Benimaclet, en el barrio del mismo nombre; la calle Martínez Ferrando, en el Pla del Remei, y la calle Joaquim Benlloch, en Malilla. Tendrán periodicidad semanal y cada uno dispondrá de un máximo de entre 15 y 20 paradas.
Entre los méritos que se evaluarán para obtener licencia para vender se encuentra, entre otros: la proximidad del producto; la calidad medioambiental; el acceso de jóvenes y mujeres al sector agroalimentario; las características de calidad del producto, como, por ejemplo, denominaciones de origen o que se trate de variedades locales y tradicionales; la economía social, o la integración de sectores de la población en situación o riesgo de exclusión social y económica.
De acuerdo con las políticas municipales de inclusión y fomento del emprendimiento, se reservará hasta un 10 % de las autorizaciones para ser adjudicadas a colectivos desfavorecidos y a nuevas personas emprendedoras.
Esta iniciativa se enmarca en la Estrategia Agroalimentaria Municipal ―aprobada por unanimidad en sesión plenaria de 25 de octubre de 2018― y el Acuerdo marco para la recuperación y la reconstrucción de la ciudad de València en el contexto postcovid-19 ―aprobado en Pleno extraordinario de 7 de julio de 2020―.
Ambos textos recogen la instalación de puntos de venta directa de productos agroalimentarios, “favoreciendo criterios de sostenibilidad, proximidad e inclusividad, atendiendo también a la localización en espacios de afluencia y complementariedad con otros centros de comercialización agroalimentarios”. La propuesta ha contado con los votos a favor de Compromís y PSPV-PSOE, el rechazo del Partido Popular y Vox, y la abstención de Ciudadanos.
Los concejales Vicente Montáñez, de Vox, y Santiago Ballester, del PP, se han opuesto a la iniciativa al considerar que provoca competencia desleal con el pequeño comercio de los barrios y mercados municipales, mientras que el edil de Ciudadanos Rafael Pardo cree necesaria “más regulación y ordenación”.
El regidor de Agricultura, Alimentación Sostenible y Huerta, Alejandro Ramon, ha recordado que los nuevos mercados en Castellar-L’Oliveral y Malilla responden a una petición de las entidades vecinales, ha defendido la venta directa ante “la vulnerabilidad a la cual está expuesta la pieza más débil de la cadena alimentaria, los labradores”, y ha insistido en que se trata de “venta no sedentaria”. “Hablar de competencia desleal es como decir que las paradas de buñuelos hacen competencia a la hostelería”, ha puntualizado Ramon.