Anteriormente esa carretera se encontraba en un estado deteriorado, y al ser una carretera muy transitada, ya que lleva al colegio Salvador Gadea y a las Encrucijadas, el Ayuntamiento consideró imprescindible acondicionarla.
La otra carretera que se ha asfaltado es la calle Sequia y los tramos parciales de la Avenida Blasco Ibañez y Teodoro Llorente los cuales se han repavimentado actuando en una superficie total de 1.614 m2. El consistorio ha priorizado estas calles ya que eran las que tenían un estado más desgastado y por las cuales transita más número de gente.
El actual equipo de Gobierno ha financiado estás obras con cargo al programa de la Diputación de Valencia de ayuda a la realización de obras en la red de caminos rurales y en la red viaria local.
