El 30 de enero se abre al tránsito el puente que enlaza las avenidas Mercé Rodoreda y Hostalets, es decir, la circunvalación que aliviará los problemas de tráfico en el Caminás y la avenida Valencia, ya que se podrá enlazar la playa, la autovía a Valencia, el instituto y las urbanizaciones sin tener que atravesar el casco urbano. Un enlace pensado para coches y camiones, pero también para bicicletas y peatones.
El puente consta de dos arcos verticales metálicos y un arco de apoyo «para aguantar el pandeo del arco principal», explica Francisco Valiente, el diseñador del proyecto. «Hemos trabajado con materiales resistentes, pero también buscando una belleza estructural, con pintura con mica que permite cambiar de color al puente según el color del cielo. Además, no sobrepasa en altura los edificios cercanos, para quedar integrado en el entorno».
«Tras la prueba de carga satisfactoria, se han finalizado las aceras y el enlace del carril bici con la Vía Xurra y, paralelamente, se está urbanizando el entorno y la plaza Federica Montseny, obras que continuarán durante varias semanas, aunque el puente se abrirá al tráfico el jueves 30 de enero», concluye la concejal de Urbanismo, Elena Camarero.