Dolors Carrasquilla, la dependiente que se encadenó el pasado 6 de marzo frente al Palau de la Generalitat para reclamar que se le reconozca el grado de gran invalidez y se derogue el llamado copago farmacéutico, ha puesto fin a su protesta el 15 de mayo por problemas familiares.
“No abandonaré la lucha, pero por problemas personales y familiares debo irme un tiempo con mi familia a Cataluña, pero continuaré luchando sin descanso mediante otras medidas y utilizando otras estrategias hasta que se cumpla con las reivindicaciones” ha explicado Dolors.