Los muestreos que detectan la presencia de restos de coronavirus en las aguas residuales de la ciudad de València, impulsados por el Ayuntamiento, indican que en las tres últimas semanas se ha registrado un descenso de la carga viral en la ciudad.
Una carga viral que, identificada mayoritariamente con la variante ómicron, se concentra, mayoritariamente, en el norte de los Poblados Marítimos. Otras zonas de València con mayor presencia de covid en aguas residuales, por encima de la media de la ciudad, son Jesús-Patraix, Pla de Real-Benimaclet, Olivereta, Campanar, Algirós, Transits, Malilla i Extramurs.
La Concejala ha presentado hoy los resultados de las analíticas de muestra recogidas semanalmente, desde el pasado 19 de enero, en diferentes puntos de la ciudad, a través de la herramienta GOanalytics, desarrollada por Global Omnium y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). “Con estos datos, que nos aportan información adicional sobre la situación de la pandemia en la ciudad y su desarrollo, podemos afirmar que desde finales de diciembre se ha registrado un descenso pronunciado de los restos de coronavirus hallados en las aguas residuales de València. Y con el descenso de este indicador, se consolida la tendencia a la baja de los niveles, porque un dato aislado no es representativo pero cuando sumamos cifras consecutivas podemos hablar de consolidación”.
Por lo que respecta a las cifras, Elisa Valía ha concretado que el pico de la curva que marca la evolución de los muestreos data de la última semana de diciembre, con 665 millones de unidades genómicas (que miden la concentración del virus en aguas residuales) de covid por litro. Y que en la última toma, se detectaron 148 millones de unidades genómicas de este virus por litro en el conjunto de la ciudad, “estando el 30% de esta cantidad concentrado en un sector, por lo que en el resto de la ciudad los niveles de restos de coronavirus ha bajado mucho más”.
“Esto no significa que haya menos personas contagiadas sino que la carga en conjunto en la ciudad es menor. Es decir, es una buena noticia pero no implica que el número de personas contagiadas baje en la misma proporción que lo que baja la concentración del virus en aguas residuales”, ha concluido la edil.