La portavoz del Grupo Municipal Popular, María José Catalá, y el senador Popular, Fernando de Rosa, acompañados también por el concejal popular Santiago Ballester, han visitado hoy el mercado de la plaza Redonda de los domingos que se monta en los alrededores del Mercado Central. Se han sumado a la campaña de apoyo a los comerciantes del mercado contra la medida del Ayuntamiento de Valencia que quiere obligarles a abandonar.
Catalá, de Rosa y Ballester han firmado sumándose a la campaña de recogida de firmas que han iniciado los vendedores. Hasta la fecha llevan más de 4.000 firmas de apoyos.
Catalá ha pedido al alcalde Ribó que piense en los perjuicios que van ocasionar a las familias que viven de estos puestos del mercado y ha reclamado que se reúna con ellos para buscar un solución satisfactoria.
Hasta la fecha este mercadillo, que lleva décadas abierto y que es un punto de visita de miles de valencianos, vendían desde ropa, calzado, plantas, flores, hasta otro tipo de complementos y artículos de regalo. La nueva Ordenanza prevé que solo puedan vender cromos y libros descatalogados, ambos productos no tienen ninguna salida. Por ello piden que se aplique la transitoria de la propia ordenanza que prevé una prorroga de la situación actual, ya que la misma la aprobaron sin hablar con ellos, o que se busque una solución que no les perjudique.
“Mientras, se quiere acabar con el medio de vida de muchas familias, el Ayuntamiento mira hacia otro lado a la hora de perseguir la venta ilegal en las calles, los conocidos top manta. Sólo se atreven con los ciudadanos y ciudadanas que pagan sus impuestos, mientras se permite el comercio irregular en muchas calles de la ciudad con los perjuicios que esto ocasiona para los comerciantes”, añadió María José Català.
La portavoz del Partido Popular, Mª José Català, ha manifestado que “es urgente que el Ayuntamiento intensifique las acciones contra la venta ambulante ilegal porque en estos momentos está absolutamente descontrolada con más de 1.000 vendedores ilegales vendiendo en zonas comerciales y en los mercados extraordinarios.”
Los vendedores del mercado que cada domingo se disponen junto al Mercado Central, se sienten ya ahogados por las limitaciones impuestas por el Ayuntamiento sobre los artículos autorizados, y podrían dejar de operar en este punto. Los vendedores reclaman que se aplique la transitoria por la que podrían prorrogar su concesiones.