Desde el inicio de la actual legislatura, en junio de 2019, se han quemado en València en actos vandálicos, 518 contenedores, de los cuales 278 son contenedores grises de la fracción resto, 165 son de papel-cartón y 75 son para envases. El coste total de estos actos vandálicos ha sido de 607.700 euros.
El vicealcalde y regidor de Ecología Urbana, Sergi Campillo, ha hecho un llamamiento “al civismo, a cuidar el mobiliario urbano y a tratarlo cómo se merece” y ha mostrado su “indignación” por el hecho de gastar dinero público en sustituir el mobiliario quemado. Campillo ha remarcado que “en estos casos lo que hacemos para persuadir de posibles actos vandálicos, es sustituir estos contenedores por otros metálicos, que son resistentes al fuego”.
La sustitución de un contenedor tiene un coste elevado para las arcas municipales. Un contenedor de cartón y envases cuesta 1.200 euros, mientras que un contenedor gris 1.150 euros. Por su parte, el recipiente de vidrio no tiene coste para las arcas municipales, porque la reposición de la unidad quemada corre a cargo de Ecovidrio.
La inspección y el mantenimiento de los contenedores, partes mecánicas, tapas y cuerpo se realiza diariamente. Cuando se recibe un aviso ciudadano al teléfono 010, o cualquier persona del servicio de limpieza, de la recogida de la inspección municipal o de la contrata detecta un defecto en algún contenedor, un equipo que se desplaza con una furgoneta que dispone de todas las herramientas y recambios necesarios para hacer el mantenimiento.