José María Aquilar, presidente de los festeros del Cristo de este año, comenta que durante los días previos al 6 de agosto, han celebrado esta festividad con mucha devoción y hermandad.
34 clavarios son los que se han reunido para dar forma y vida a este día tan festivo que sirve como excusa, según cuenta Aguilar para “volver a reencontrarse con viejos amigos de juventud”
El día grande de la festividad comenzó con una despertà, un pasacalle y la tradicional misa que congregó a muchos vecinos de Alboraya.
El broche de oro de estas fiestas tuvo lugar con la esperada procesión, que recorrió el casco antiguo de Alboraya bajo la atenta mirada de muchos fieles que acompañaron la imagen del Cristo de la Providencia.