El Ayuntamiento de Alboraya y la Dirección General del Agua y Desarrollo Rural han mantenido una reunión para abordar la problemática de la contaminación de las acequias, una situación que afecta a varios municipios de la comarca y que el pasado año provocó el cierre de playas en la costa valenciana.
Un problema que supera las competencias municipales
Desde el Ayuntamiento de Alboraya han destacado la importancia de que las administraciones superiores actúen en el origen del problema, ya que parte de los vertidos contaminantes provienen de fuera del término municipal.
Como parte de las actuaciones externas, la Generalitat trasladará a la Confederación Hidrográfica del Júcar el caso del vertido de la acequia próxima a Peixets, con el objetivo de encontrar una solución a largo plazo.
A nivel local, el consistorio trabaja en tres soluciones complementarias: Un nuevo colector en la zona de Tendetes, que requerirá la colaboración entre Almàssera y Alboraya; el desvío de acequias, una propuesta incluida en el Plan de Inversiones de la Diputación de València y en los Presupuestos Municipales de 2025 y el futuro Parque Agrario de Peixets, que incluirá un humedal artificial para el filtrado del agua de las acequias.
El impacto en la huerta y las playas de Alboraya
La concejala de Urbanismo, Ana Bru, ha explicado que el municipio lleva años trabajando para mejorar el tratamiento del agua en el polígono industrial, las alquerías de la huerta y otras infraestructuras previas a la normativa actual. Bru ha señalado que "estamos trabajando en localizar vertidos en Alboraya, pero también necesitamos ayuda para solucionar los que vienen de fuera".
Bru ha insistido en que la contaminación de las acequias es un problema que afecta directamente a las playas de Port Saplaya y Peixets, donde se han registrado episodios de contaminación por bacterias E. coli y enterococos. La concejala de Urbanismo ha afirmado que "no es justo que municipios como Alboraya, que somos la última parada de las acequias, veamos nuestras playas cerradas por vertidos que se producen a una escala mayor a nuestras competencias".
El Ayuntamiento de Alboraya y la Dirección General del Agua han acordado celebrar una nueva reunión técnica para localizar los focos contaminantes y definir los próximos pasos a seguir.