En un comunicado conjunto las tres asociaciones explican que lo primero que se tiene que hacer es declarar los fondos “colección museográfica”. Las tres asociaciones recuerdan que la colección está compuesta por unas 7.000 piezas entre maquinaria, espolines, herramientas, bocetos de finales del siglo XVIII, dibujos, cartones, y una amplia documentación, además de once valiosos telares Jacquard del siglo XIX, en los que trabajan y seguirán trabajando los operarios de Garín.
Según las tres asociaciones, “precisamente, que aún siga en funcionamiento al mantener los telares activos, es la mayor particularidad de este centro, lo que lo hace el único “museo” de la seda vivo de España” por lo que piden agilizar los trámites del futuro Museo de la Seda, museo que el Ayuntamiento de Moncada llegó a promocionar en la pasada edición de Fitur.
En el momento que se cree la colección museográfica, la antigua fábrica Garín “podrá abrirse al público con un horario regulado e incluso con visitas guiadas para que su rica colección pase a convertirse en un verdadero reclamo turístico, que beneficiaría económicamente a Moncada. La puesta en marcha del Museo de la Seda atraería a los visitantes; su cercanía a Valencia y la fácil comunicación facilitaría esta conexión entre Moncada y Valencia, otro centro referente de la seda desde el siglo XV”.
Otra de las peticiones es que se incluya este futuro museo en la Ruta de la Seda, cuyas actividades están siendo programadas por la Generalitat Valenciana, lo que sería para para los peticionarios “una oportunidad única para relanzar el museo”. En este sentido, las tres asociaciones recordaron que el Secretario Autonómico de Turismo, Francesc Colomer, mostró su disposición a incluirlo en este proyecto que se desarrollará a partir del año próximo y cuyo objetivo es poner en valor el enorme patrimonio ligado a la seda y su comercio.
“Al ser un museo vivo, que sigue en activo porque se sigue tejiendo, quién lo visitara podría ver y aprender cómo se teje en un telar a la manera tradicional; esta particularidad posee un enorme atractivo que pondría en el mapa a Moncada, sin lugar a dudas. Además, sería visitado por los centros escolares para conocer y aprender todo lo relacionado con la seda, el oficio, las técnicas, las herramientas, y la fábrica, que siempre fue un motor económico y generador de empleo para la ciudad”, según defienden las asociaciones.