La alcaldesa de València, María José Catalá, ha puesto fin a la polémica sobre el posible traslado del festivo de San Vicente Mártir. A pesar de las propuestas del anterior gobierno para flexibilizar la fecha, Catalá ha confirmado que la celebración se mantendrá el 22 de enero.
Catalá ha justificado su decisión aludiendo a la voluntad de los colectivos vinculados a la festividad, quienes desean preservar la tradición en su fecha original. Además, ha criticado a los grupos políticos que proponen cambios sin participar activamente en la organización de la fiesta.
"Lo que no tiene sentido es que aquellos que nunca participan en la fiesta, como es el grupo Compromís, aboguen por el cambio", afirmó la alcaldesa.
Comercios podrán abrir el 22 de enero
Paralelamente, el Ayuntamiento de València ha autorizado la apertura comercial el próximo 22 de enero, coincidiendo con el día de San Vicente Mártir. Esta decisión, que ha generado cierta controversia, permitirá a los establecimientos comerciales abrir sus puertas si así lo desean.
Críticas de la oposición
La oposición ha mostrado su desacuerdo con la decisión de mantener el festivo fijo y ha cuestionado la forma en que se ha tomado la decisión de permitir la apertura comercial. El grupo municipal socialista ha denunciado falta de consenso y ha exigido a la alcaldesa que rectifique.