Quienes padecen dolor constante en la espalda se ven en la necesidad de recurrir con frecuencia a profesionales médicos para recibir medicamentos o tratamientos de fisioterapia.
Por supuesto, esto es algo indispensable cuando se tiene una condición crónica de salud; sin embargo, una de las estrategias preventivas de este dolor es cambiar hábitos, como la postura al dormir, lo que implica hacerse de recursos tales como colchones duros que pueden condicionar un buen descanso de la espalda.
¿Por qué ocurren los dolores de espalda?
Tener una espalda saludable repercute sobre la vida activa de la persona. Por eso, cuidar esta zona del cuerpo es fundamental para que toda la anatomía corporal esté en buen estado. La columna vertebral puede causar graves problemas en la salud en general; en 2020, se informó que más de 600 millones de personas padecen de lumbalgia y se estima que esta cantidad aumente en un 25 % para el 2050.
En su mayoría, los dolores de espalda provienen de la desatención a esta zona. Por eso, hay que tomar conciencia sobre la higiene postural. Para eso, es importante evitar alzar sobrecargas de peso y esforzarse de forma excesiva al moverse y realizar actividades de forma inadecuada.
Quienes trabajan frente a un ordenador o realizan actividad física de alto impacto deben cuidar su espalda. Y tal cuidado debería suponer acciones de prevención que disminuyan la necesidad de acudir al médico, lo que implica un beneficio en su productividad laboral diaria.
¿Qué hacer para cuidar mejor la espalda?
Desde la mediana edad se recomiendan los ejercicios aeróbicos que fortalezcan tanto los músculos como los huesos. De acuerdo a la condición de cada persona, así como la edad y la etapa en la que se encuentre, se pueden sugerir la combinación de esta actividad física con dieta saludable rica en calcio, exposición a la luz solar en horas adecuadas y consumo de vitamina D.
Ahora bien, existen más estrategias que puedes aplicar para que tu espalda y la salud, en general, se beneficien. La buena postura corporal es sin duda el primer paso para cuidar de la espalda. En caso de que se trabaje en casa, es preciso hacerse de una silla ergonómica que permita el descanso apropiado de la espalda durante largos períodos de tiempo sentados.
Tener un peso apropiado a la contextura física puede contribuir a evitar o mejorar los dolores de espalda, así que es muy recomendable tener la costumbre de alimentarse lo más saludable posible y hacer actividad física cada día.
Para no tener dolor de espalda, también es apropiado evitar cargar peso excesivo y, de hacerlo, procurar la adopción de una postura ergonómica para el trabajo, sin olvidar que el uso de calzado adecuado es imprescindible para la salud de la columna y espalda.
En definitiva, el descanso es fundamental para la salud, incluida la de tu columna vertebral. Dormir las horas suficientes en una postura saludable es imperativo para cuidar la espalda, para lo cual es importante prestar atención a la condición del colchón sobre el que se duerme, sentarse en sillas ergonómicas, llevar una alimentación saludable que permita un peso adecuado y realizar actividad física de forma frecuente.