Tras cantarle a la imagen de San Fermín para pedirle suerte en el encierro, los toros de cartón piedra han rodado por las calles de Albalat dels Sorells, entre la algarabía de los más pequeños. El bou embolat ha sido una de las principales atracciones. Tras el encierro y la vuelta de los astados a toriles, los más pequeños han repuesto fuerzas y finalmente se ha realizado una foto de familia.