El Ayuntamiento del Puig ha identificado el que considera el último foco de contaminación de las aguas de la playa de Medicalia. Se trata de una acequia cubierta que recoge las aguas residuales de varias urbanizaciones de la localidad vecina de La Pobla de Farnals y que, justo antes de llegar al mar, se desvía hacia el término del Puig, desembocando en la playa de Medicalia, en el lado del espigón perteneciente a este municipio.
A pesar de ello, según informan desde El Puig, Medicalia sigue teniendo latente la amenaza de la contaminación. "Nos gustaría poder anunciar que el problema se ha solucionado, pero no es así. Lo que ha ocurrido, simplemente, es que este verano hemos tenido la suerte de que no se ha producido ningún vertido contaminante de relevancia ", señala el concejal de Playas, Fernando Checa.
Por su parte, el concejal de Medio Ambiente, Vicent Porta, explica que “en un principio, hace más de treinta años, la contaminación era descontrolada, pero a lo largo del tiempo el control sobre los vertidos se ha intensificado y se han ido corrigiendo y eliminando los focos de contaminación hasta llegar al punto donde nos encontramos ahora, en que con los datos que hemos recogido y las acciones que hemos llevado a cabo durante estos últimos dos años podemos afirmar que el último punto que necesitamos corregir es el conector con las aguas residuales que llegan de Pobla de Farnals”.
Dicha acequia subterránea recorre el término municipal de la Pobla y, poco antes de llegar al mar, se desvía y desemboca en el término del Puig. Así, las aguas pluviales y residuales que recoge acaban desembocando en la playa de Medicalia, al otro lado del espigón que separa ambas poblaciones. Cuando se produce un vertido contaminante en el municipio vecino, el espigón funciona como muro de contención. El agua contaminada alcanza Medicalia mientras que en la Pobla sigue ondeando la bandera azul.
La organización Ecologistas en Acción identifica el mismo problema en su informe Banderas Negras de 2017. Desde que la organización ecologista publica su informe anual sobre las zonas no recomendadas para el baño, la playa de Medicalia aparece en un lugar destacado. La novedad de la edición de este año es que sus investigadores coinciden en identificar el foco de contaminación en el municipio vecino.
Porta ha señalado: "nosotros tenemos controlado el sistema de saneamiento y de riego del Puig, pero no podemos hacer lo mismo con el de la Pobla. La novedad es que hemos podido identificar el problema con pruebas concluyentes y ponernos en contacto con el consistorio vecino porque sean conocedores y podamos trabajar conjuntamente para encontrar una solución".
La alcaldesa del Puig, Luisa Salvador, y el alcalde de La Pobla, Enric Palanca, se han puesto en contacto en varias ocasiones para tratar el asunto. “No eran plenamente conocedores de la situación y la respuesta por su parte está siendo positiva”, señala Salvador.
Todavía es pronto para encontrar resultados definitivos, pero desde la Concejalía de Medio Ambiente se apunta que la relación entre los técnicos de ambos consistorios está siendo “fluida y productiva”. Por ello, el Consistorio del Puig celebra que, “después de más de 30 años de ignominia, empieza a verse un rayo de luz al final del camino”.