La Mancomunitat Intermunicipal de l’Horta Sud gestiona el servicio de recogida, custodia y protección de animales de compañía abandonados, errantes o decomisados, el tratamiento de animales fallecidos en espacios públicos y el desarrollo de la estructura necesaria para fomentar siempre su posterior adopción en 12 municipios de la comarca. Nueve de ellos lo gestionan de manera conjunta desde hace años -Albal, Aldaia, Alfafar, Benetússer, Beniparrell, Catarroja, Paiporta, Picanya y Quart de Poblet- y otras tres localidades -Mislata, Sedaví y Xirivella- se han a este servicio durante el pasado mes.
La empresa que gestiona la recogida de animales actualmente, Gossos d’Alpe, tiene casi 200 perros en espera de adopción en sus instalaciones de Sollana. El centro cuenta con una veterinaria, de lunes a sábado, que se encarga de administrar la vacuna antirrábica a todos los animales que llegan, así como de colocarles un microchip. Los perros que más cuestan de adoptar son los de gran tamaño, tipo mastín, pastor alemán o los considerados de raza potencialmente peligrosa (Pitbull, American Stafford,…), por lo que se hacen campañas específicas para adoptar estos ejemplares, como la actual Adopta un Grandullón.
Los responsables municipales que tienen este servicio mancomunado exigen, en cada convocatoria, el sacrificio cero de los animales recogidos, así como el fomento de la adopción de los mismos. Son pocas las empresas que dan este servicio y ninguna de ellas con sede en la comarca.
Todos los sábados del año, de 10:00 a 13:30, el centro Gossos d’Alpe abre sus puertas para que voluntarios y familias puedan pasar un día de convivencia con los animales del centro. Los pasean, juegan con ellos y descubren una forma diferente de tener ocio en familia.